Murió Carlos Aberto Pairetti, leyenda del automovilismo
Fue este lunes por consecuencias respiratorias. Protagonista del automovilismo argentino durante más de dos décadas que corrió con todas las marcas y llegó al plano internacional. También incursionó en el cine. Amigo de Fangio y de gran relación con Balcarce. Tenía 86 años.

A los 86 años murió este lunes el Campeón argentino Carlos Alberto Pairetti, referente de las máximas categorías del automovilismo argentino y una leyenda del deporte motor. El excampeón de Turismo Carretera, santafesino de origen, permanecía internado hace semanas en su lugar de radicación, Arrecifes, del que fue trasladado el domingo hacia Pergamino por una complicación en el cuadro de su salud, pereciendo como consecuencia, según confirmó su hijo Eduardo “Mani” Pairetti. El piloto, había contraído una neumonía bilateral posterior a un ACV que apenas pudo superar, hace un mes.
Su última aparición pública fue hace algunos días en el autódromo Oscar y Juan Gálvez, donde asistió al debut de su nieto Santino, hijo de “Tim”, en la categoría ALMA con un Fiat Uno de la Clase 2. Ilustre integrante de la “Cuna de Campeones” de Arrecifes, Pairetti ingresó en la galería de las grandes personalidades del automovilismo nacional con su recordado título de TC en 1968 con una coupé Chevrolet inmortalizada como el “Trueno Naranja”. Había nacido en Estación Clucellas (Pdo. Castellanos/STA FE) el 17 de octubre de 1935. Su debut en el TC fue en 1962 en la “Vuelta de Pergamino”, con Chevrolet.
EN BALCARCE. Pairetti en la cupecita de Fangio, en el lanzamiento de la Fiesta del Automovilismo 2016.
Al igual que Juan Manuel Fangio, la marca del moño lo tuvo como emblema durante casi toda su carrera. En 1963 logró en Mar del Plata su primera victoria. Precisamente, este año y luego de otro triunfo, lograría alzarse con su primer Gran Premio, obtenido en el recorrido que unía Mercedes con su Arrecifes adoptiva. Con esta coupé, Pairetti obtuvo 9 triunfos entre 1963 y 1966. En 1965 logró un histórico triunfo con Volvo, marca con paso raudo por el TC y de la que Pairetti fue su único piloto. Ya afianzado a Chevrolet, ltuvo su gran año con el “Trueno Naranja”, con el obtuvo cuatro victorias y el mencionado título.
En 1970 dio un giro en su carrera al firmar con Ford, empresa que lo contrató como piloto y que también financió su paso por el cine: en la película que protagonizó con Ricardo Bauleo y Gilda Lousek, Pairetti interpreta a un directivo de la marca del óvalo. También fue doble de Sandro, en la película “Siempre te amaré”, donde el “gitano” interpreta a un piloto de carreras que sufre un accidente. En ambos casos, dirigió las películas Leo Fleider. En el plano competitivo, los hinchas del “chivo” lo miraron con recelo, los de Ford no lo terminaron de aceptar y entremedio se distanció de José Miguel Herceg, su motorista.
HACIENDO CINE. Pairetti fue doble de Sandro, que interpretó a un piloto de TC en “Siempre te amaré”
Posteriormente incursionó con fugaz éxito en el plano internacional. Fue el primer piloto argentino en correr en la Fórmula 3 europea y en las 300 Millas de Indy. Después, intentó sin éxito clasificar en las 500 millas de Indianápolis, pero dejó una buena imagen, asegurándose un buen auto para las 300 Millas que se corrieron en 1971 en Rafaela. En plena dictadura (1977), volvió al país y al TC, logrando su última victoria el 26 de marzo de 1978, con Dodge. Se retiró en agosto de ese año. También fue comentarista de Carburando. Su relación con Balcarce fue permanente dado a su gran amistad con Fangio.
En 1968 se impuso en la accidentada vuelta Balcarce-Lobería que se cobró ocho muertos y 25 heridos en tres accidentes distintos y que dio origen a la creación del autódromo “Juan Manuel Fangio”. En 1982, junto a Jorge Cupeiro, otra leyenda, crearon el Campeonatos Argentino de Pilotos, una suerte de Top Race de los ´80, monomarca Datsun, que debutó en Balcarce y con la participación las estrellas del momento, Pairetti y Cupeiro incluidos. Fue objeto de sendos homenajes, y su sus coches-emblema Trueno Naranja y Liebre, se exhiben en el Museo “Fangio”. Con Carlos Pairetti se va un gran trozo de historia del automovilismo nacional.
EL TRUENO. La cupé Chevrolet Stevens 250 con la que Pairetti logró el título argentino de 1968.