Buceta: “pensamos a futuro para mantener viva la disciplina”

La paleta, como todo el grueso del deporte en general, no está exento a la veda competitiva que habitualmente realiza los fines de semana en el histórico trinquete del Club Social y Campo de Pato, en calle 19. Sin embargo, integra el selecto grupo de actividades permitidas, que con alguna dificultad debido al horario que dispone, puede ofrecerse para el disfrute de quienes la practican. Un deporte tan pasional como sociable, hoy se aquejado justamente en estas acciones: no solo no puede desarrollar sus torneos “ráfaga” de un finde, y mucho menos reunir a su limitada pero ferviente comunidad en sus altos miradores.

Para Bernardo Buceta, uno de los integrantes más activos y practicantes de la actividad desde hace mucho tiempo “hubo que reorganizarse” en el sentido de muchas acciones que hasta el momento no eran comunes para la actividad: turnos por anticipado, disputas en un horario complicado (de 13 a 18hs), ya que la paleta es más bien de práctica nocturna, limitación restringida de espectadores (no más de 10 personas), y todo el protocolo correspondiente de sanitización. “no seremos nosotros los que demos un paso el falso”, advirtió. Empero, el dirigente no se queda solo en la cuestión actual: avizora proyectos.

Cupo habitual y proyectos en mente

“Nos estamos readaptando a la situación, tras una larga pausa que comenzó el 15 de marzo y se reinició hace un par de meses cuando nos autorizaron el protocolo sanitario”, cuenta Buceta. “La práctica se está realizando por turnos, aunque con alguna dificultad por los horarios, ya que el espacio de tiempo con el que contamos coincide con el horario laboral de quienes vienen a las prácticas”, asiente. Sin embargo, la paleta se mantiene a fuego lento ya que “mantiene el cupo de gente que habitualmente practica el deporte, sumando a la vez a algunos pelotaris reconocidos que ya estaban alejados de la actividad”, sostiene.

Para Buceta, el hecho de recuperar adeptos “es una manera de devolverle a la cancha la gente que fue parte, integrándola con nuevos practicantes”. En medio de la tanta pausa competitiva, la dirigencia pelotari se permite pensar a futuro, como la reactivación de la Escuela que supieron conducir en diferentes épocas los reconocidos campeones internacionales Gerardo Romano y Walter Larregle, y en la constitución de un seleccionado local que represente al CSCP a nivel regional: “Siempre jugamos entre nosotros y nunca representando al Club”, asiente. “pensamos a futuro para mantener viva la disciplina”.

Empero hoy, el movimiento se reduce a un limitado protocolo reducido a los turnos cerrados y de manera anticipada para socios, sin acceso a cancha libre. “Estamos dando el turno únicamente por celular o wathssap y reduciendo al mínimo posible la cantidad de espectadores, algo que en principio no teníamos permitido. Por el hecho de contar como unos pocos con la posibilidad de desarrollar la actividad, es que no queremos dar ni un paso en falso”, promedió. El partido pasional pre asado o picada mediante que los fines de semana resonaba por las paredes marcadas del trinquete, tendrá que esperar un tiempo más.